La iluminación de tu auto es un elemento clave para la conducción, sobre todo, durante la noche, ya que permite que veas obstáculos, a otros conductores o peatones y que también seas visible para ellos.
Si tus luces se averían o no cumplen correctamente con su función, es posible que tu seguridad esté en riesgo. Por ello, a continuación, te compartimos la importancia de conducir con el sistema de iluminación en perfectas condiciones.
Mejora la visibilidad en la carretera
Al circular de noche en zonas montañosas, carreteras poco iluminadas, con neblina o lluvia, la visibilidad suele ser más reducida y, por lo tanto, es más complicado maniobrar tu carro. De hecho, la academia de manejo estadounidense E Permit Test, señala que las decisiones que tomas al conducir se basan en lo que puedes observar a tu alrededor.
Por eso, es esencial que mantengas las luces de tu vehículo en perfecto estado, tanto las bajas como las altas y los faros antiniebla que en algunos modelos suelen estar instalados en el bumper delantero. En caso de las neblineras traseras, todos los carros las incorporan y son de uso obligatorio para circular en carretera.

Evita multas y sanciones
Asegurarse de que todo el sistema de luces de tu carro, incluyendo las intermitentes, las de freno, las luces altas y las bajas, estén funcionando correctamente es esencial para evitar infracciones o accidentes viales.
Según la Ley de Tránsito de Honduras se considera una falta grave conducir tu vehículo sin las luces reglamentarias. Inclusive, las autoridades correspondientes podrán sancionarte con una infracción de 600 lempiras.
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Sé visible para otros conductores
Un vehículo con luces en mal estado es más difícil de detectar, lo que aumenta el riesgo de colisiones o atropellos. Mantener una iluminación adecuada permite que otros conductores te vean con anticipación y puedan reaccionar a tiempo. Para evitar problemas, cambia las bombillas siempre en pares (delanteras y traseras). Así reduces la posibilidad de que el otro foco falle pocos días después del reemplazo.
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Preguntas frecuentes sobre el sistema de luces del carro
¿Por qué es importante revisar las luces del vehículo?
Porque garantizan visibilidad al conducir y permiten que otros conductores te identifiquen. Además, mantenerlas en buen estado reduce el riesgo de accidentes, especialmente en condiciones de poca luz.
¿Cada cuánto tiempo se deben cambiar las bombillas del carro?
Se recomienda reemplazarlas cada 50 000 kilómetros o cada dos años, aunque aún funcionen. Con el uso prolongado, su intensidad disminuye y puede afectar tu visión nocturna.
¿Qué señales indican que una luz necesita cambio?
Si notas que las luces alumbra menos, parpadean o presenta un tono más amarillento de lo habitual, es momento de reemplazarla. También presta atención si se enciende el testigo de luces en el tablero.
¿Puedo cambiar las luces por mi cuenta o debo ir al taller?
Puedes hacerlo tú mismo si el modelo lo permite, pero lo ideal es acudir a un taller certificado. Allí revisarán el sistema eléctrico y garantizarán una instalación correcta para evitar daños en los faros.
¿Qué consecuencias tiene conducir con las luces en mal estado?
Además de exponerte a una multa, disminuye tu seguridad y la de los demás. Conducir sin una buena iluminación puede impedir que detectes obstáculos a tiempo o que otros vehículos te vean correctamente.
Conducir con las luces en buen estado garantiza tu seguridad y la de quienes te rodean. Revisarlas con frecuencia, reemplazarlas a tiempo y darles mantenimiento, previene accidentes y mejora la visibilidad en carretera. Cuidar tu vehículo refleja responsabilidad y compromiso al volante.
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