Hoy más que nunca saber de educación financiera tiene gran importancia para la economía personal y familiar. Según los expertos, la educación financiera es “la capacidad de entender cómo funciona el dinero en el mundo: cómo una persona lo obtiene, lo administra y lo invierte”.
Por eso es tan relevante conocer y administrar bien lo que tienes, especialmente en este tiempo que estamos viviendo. La pandemia ha provocado cambios no solo en nuestro estilo de vida, muchas personas y empresas se han visto afectadas al quedar sin trabajo o tener una baja en sus ventas.
Todo esto ha de llevarnos a tomar las decisiones correctas para hacer un buen uso del dinero con el que contamos. Para ayudarte a tener unas finanzas saludables te compartimos algunos consejos y que te ayudarán en esta tarea.
Importancia de un presupuesto
Una de las razones por las que debemos hacer y llevar un presupuesto, es que nos ayudará a vivir con lo que tenemos, evitar deudas innecesarias, para lograr los objetivos que podamos tener a un corto o largo plazo. Antes de gastar debes preguntarte, si realmente necesitas hacer esa inversión, o solamente es un gusto o un deseo.
¿Qué es un presupuesto?
Lo definiremos como una herramienta en la cual nosotros le diremos al dinero donde ir. Este instrumento financiero nos sirve para saber en qué gastamos nuestro dinero y si lo estamos aprovechando de la mejor manera para hacer frente a los compromisos actuales y futuros. También es clave para identificar cuánto podemos destinar al ahorro.
¿Cómo hay que llevarlo?
Un plan escrito nos permite registrar nuestros movimientos como los gastos diarios, todo lo que pagamos y gastamos durante el transcurso de un día, una semana o un mes, teniendo como parámetro nuestra entrada fija. Así es posible responder estas preguntas… ¿Cuánto gasto?; ¿Cuánto tengo?; ¿Cuánto debo?...
Si el presupuesto es familiar y ambos tienen ingresos, deben unir tanto los ingresos como los gastos. Este tiene que ser lo más cercano posible a la realidad, por lo conviene ser honestos al momento de estarlo elaborando.
Las palabras clave para elaborar un presupuesto son: Ingresos – Egresos = Diferencia. Si la diferencia es positiva, significa que nos queda dinero a nuestro favor, el cual lo podemos asignar a tres cosas: 1) Depositar en cuenta de ahorro. 2) Destinar al fondo de emergencia. 3) Abonar al capital de préstamo.
Pero si la diferencia es negativa, está claro que nos hace falta dinero. Por lo que nuestra opción sería: 1) Revisar los gastos y ver cuales se pueden reducir o cancelar. 2) Buscar nuevas fuentes de ingresos.
Cumplir el objetivo del presupuesto
El presupuesto se tiene que estar revisando de manera constante, por lo menos una vez a la semana, para ver si vamos bien, y si es posible hacer ajustes para poder cumplirlo; esto será un reto en los primeros meses, pero luego será un hábito que nos traerá muchos beneficios.
Algo importante es que esto debemos compartirlo con la familia, si hay hijos no importa la edad podemos hacerlos partícipes y hacerlo de manera agradable, no tiene que ser algo impositivo, poco a poco todos se verán beneficiados porque esto traerá paz financiera en el hogar.
Banpaís te brinda estos consejos financieros para que tengas una economía saludable.