Para desarrollar empresas exitosas

“La motivación es lo que te ayuda a empezar. El hábito te mantiene firme en tu camino” Jim Rohn exitoso empresario, autor y motivador.

El ser humano desde que nace empieza a realizar acciones repetitivas las cuales se convierten en hábitos que quedan en su memoria y luego se vuelven una práctica.

Según un concepto: “Un hábito es una acción que se realiza de forma natural hasta el punto de convertirse en algo espontáneo”, es decir, supone cambiar de conducta y esto no siempre resulta fácil.

Los buenos hábitos se adquieren en base a la experiencia y la repetición de los mismos, su formación y desarrollo puede llevar mucho tiempo y son parte fundamental para lograr objetivos a corto y largo plazo. Especialmente si se trata de negocios y administración de los recursos propios.

Muchos empresarios exitosos a nivel mundial coinciden que los hábitos financieros son muy importantes para el éxito de una empresa, porque no solo es el hecho de fundarla y sostenerla, es de que sea productiva y marque la diferencia en lo que hace, ya sea en la línea de servicio, elaboración de productos o el rubro al que se dedique.

Y para nombrar a algunos de ellos citaremos a los famosos como: Larry Page, Carlos Slim, Walt Disney, Warren Buffet, Inda Nooyi, Kevin Johnnson, Marissa Mayer y Jeffrey Katzenberg, entre otros.

Sus experiencias de vida en las finanzas y en la dirección de sus compañias son de gran ayuda para los nuevos ejecutivos que se proponen grandes retos, a fin de hacer que sus empresas destaquen entre las mejores.

Y apoyados en su experiencia los expertos opinan que el elemento principal para llevar a cabo un buen hábito es la disciplina, entendida como la capacidad de posponer el placer inmediato para obtener beneficios.

En base a su experiencia comparten varios consejos básicos, pero de acción imperativa que los empresarios pueden seguir para lograr sus objetivos y hacer de sus empresas los emporios que desean, pero siempre con la fijación de la práctica de hábitos saludables. 

Una visión clara

El cofundador de Google Larry Page, hace una interrogante muy importante a los inversionistas, ¿a dónde quieres llevar tu empresa? refiriéndose a la visión que los motiva y luego afirma “Lo que hoy ves con tanto miedo, en unos 10 años lo verás como pruebas insignificantes que pudieron acabar con el mejor proyecto de tu vida”.

El éxito de cualquier negocio se basa en el buen manejo de los recursos, la innovación y ser competitivos ante otras empresas no importa el rubro que cada una desarrolle, por lo tanto tener el hábito de una visión clara, asegura la práctica y desarrollo de estrategias planificadas en conjunto, sin dejar nada al azar.

Manejo de presupuesto

En cuanto al presupuesto, los expertos aseguran que es el primer paso que los empresarios deben tener bien claro para tener unas finanzas sanas. En éste, se debe de reflejar a detalle: ingresos y egresos de manera mensual.

Algunos de los elementos que debes de incluir son: gastos por servicios obligatorios, préstamos y tarjetas bancarias, el consumo de productos o servicios innecesarios, gastos hormiga y no menos importante, contemplar un fondo de emergencia.

Por eso hacemos alusión a la recomendación que hace el Centro para la Competitividad de Ecoempresas, el cual detalla que la gestión financiera es vital en este sentido, ya que permite manejar los recursos de forma óptima y a la vez “vigilar” la salud empresarial.

Ser cumplidor

Con las deudas hay que tener mucho cuidado, pues a pesar de que son necesarias para desarrollar nuevos proyectos, éstas generan grandes compromisos para la empresa.

Lo más prudente es tener reflejados esos pagos en el presupuesto de forma que no se olviden, ya que los atrasos generan mora y entonces ya no sería de beneficio o ganancia para la compañía.

El pago de las deudas es un hábito práctico que permite a las empresas tener estabilidad y así sus finanzas están saludables, dado que se tiene control de los gastos actuales y futuros.

Estrategias a seguir

Es clave para cada empresa que los socios conozcan y tengan una idea real del flujo de caja, el valor de los activos y las deudas por pagar.

El balance en la chequera no siempre es indicativo que todo marcha bien, por eso se deben generar estados financieros cada trimestre para saber la salud financiera de la empresa.

La estrategia de planificación y de capitalización del negocio deben ir de la mano, para planear de forma más efectiva y lograr los resultados que se buscan.

Es importante hacer un buen manejo de las finanzas, vencer los desafíos y aumentar los esfuerzos y habilidades como buenos y exitosos empresarios, que quieran dejar una huella positiva en el país.