La experiencia de manejar nuestro primer carro está llena de emociones encontradas, desde la felicidad por estar frente al volante hasta los nervios por empezar a tener el control de cuatro ruedas.
Cuando se trata de aprender a manejar, muchas personas recurren a un familiar o amigo para las lecciones básicas como el encendido, identificar el acelerador del freno, uso de intermitentes, entre otras. Seguramente reconocerás alguna de estas frases: “Ambas manos en el volante”, “no se rebasa por la izquierda”, “amarillo es precaución” que son de las primeras reglas que se enseñan.
Pero tener carro también implica el hecho de conseguir licencia, es decir que debemos pasar por una prueba tanto teórica como práctica para obtenerla y asegurarnos que somos capaces de circular de forma responsable.
Para ayudarte a tener mayor confianza a la hora de manejar y evitar accidentes, en el equipo Banpaís creímos oportuno prepararte las siguientes recomendaciones.
Presta atención al punto ciego
Son zonas que el espejo del retrovisor no alcanza a mostrar, impidiendo la visibilidad del conductor. Al ser principiantes, solemos confiarnos de todos los equipos de nuestro carro, sin embargo, los puntos ciegos dependen mucho de la intuición, la observación y la posición del cuerpo.
Lo primero que te aconsejamos es acomodar tu asiento de tal forma que alcances los pedales y manipules el volante cómodamente, luego, acomoda tus espejos laterales de forma que tengas una mínima visión de la parte trasera de tu carro, con precaución mira hacia los costados a la altura de la ventana para verificar cuando no hayan vehículos a los lados y por último pero no menos importante, mantén una distancia prudente ente los carros, si logras visualizar las llantas del vehículo frontal es un buen indicador de distancia segura.
Revisa con frecuencia
Para prevenir revisa periódicamente el nivel de aceite, agua, líquido anticongelante, de frenos y la presión de aire en las llantas. Sin importar que el vehículo sea nuevo, seminuevo o usado, las llantas son fundamental y se debe dar el cuidado que ameritan, y aunque te sorprenda, conducir con la presión de aire incorrecta puede provocar un accidente.
Investiga cuál es el nivel correcto para tu modelo y tamaño de carro con un mecánico e intenta mantener la misma presión siempre. Haz el hábito de revisarlas diario y no solo cuando realices viajes largos.
Mantén la paciencia
El tráfico puede llegar a ser un medidor de paciencia, a nadie le gusta esperar, es una verdad universal; sin embargo, respetar las filas y guardar la compostura puede hacerlo fluir más rápido.
Detrás del volante debes sacar tu máxima capacidad para manejar el estrés y tus emociones, recuerda que no eres la única persona que debe llegar a la oficina, o la escuela o a casa, y aunque a veces hay conductores que pierden sus estribos y se desquitan con el pito, trata de mantener los nervios bajo control.
¿Qué aconsejamos para estos casos? La música es una buena compañera para hacer pasar los minutos, pon tu playlist favorita y empieza un karaoke, o busca una canción en la radio que te ayude a bajar el mal humor.
Lleva un kit de seguridad
El primer error en el que caemos es confiarnos y no prevenir. El baúl debe tener un espacio especial para un kit básico de herramientas de seguridad que te auxilien en cualquier situación de emergencia.
Ten en cuenta los siguientes elementos:
- Llanta de repuesto en buenas condiciones.
- Triángulo reflectivo con soporte.
- Gato hidráulico.
- Llave de cruz.
- Cables de corriente auxiliar.
Esto es lo mínimo que debes llevar en tu vehículo, también podemos recomendarte andes con botes diferentes líquidos como congelante, aceite o agua que también pueden resultar útiles junto con una caja de herramientas básica.
Circula con seguridad
Esperamos que con estos consejos te sientas más seguro de ir tras el volante y seas de los conductores responsables que se comprometen con la seguridad vial. La clave es mantener la confianza en uno mismo, evitar las distracciones y mantener la concentración.
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