Para unos, las vacaciones son sinónimo de aventurarse y explorar horizontes, descubrir lugares ocultos, degustar una gastronomía diferente, e inclusive perderse en islas paradisiacas.
Si ya tienes un destino en mente, déjanos decirte que, las maletas no son lo único que debes hacer antes de partir. En innumerables ocasiones las personas suelen subestimar los gastos de viaje, cuando la planificación de un presupuesto es tan elemental como la reserva de hotel o boleto de avión.
Entonces toma lápiz y papel y hagamos un plan juntos. ¿Empezamos?
1.Evalúa tus finanzas
Son las que determinan el monto disponible para viajar. Los gastos fijos deben ser tu prioridad, asegúrate que el dinero destinado para el alquiler, los servicios públicos, comida, gasolina y el pago de la tarjeta de crédito cubra todo. Y si decidiste utilizar un porcentaje de tus ahorros para este objetivo, no dejes que tu fondo quede en cero, siempre puedes encontrar otras formas de desconectar más accesibles.
2.Elige el destino
Seguramente puede resultarte el paso más fácil, sin embargo, no quiere decir que se deba tomar a la ligera. Piensa que en temporada alta los lugares suben sus precios, así que toma en consideración la popularidad turística, si cuenta con hospedajes accesibles, un clima favorable y la duración de tu viaje.
3.Determina un aproximado de gastos
¿Ya tienes tu punto en el mapa? ¡Excelente! Ahora haremos un presupuesto aproximado en el que incluiremos:
Puedes cotizar los precios reales online como los del hotel y la movilización, pero un buen tip es subir cierto porcentaje al precio real ya que este podría variar en unas semanas, lo que ocurre con frecuencia en verano.
Haz una bitácora de gastos
Es una forma de llevar el control de tu presupuesto y evitar excesos, anota los pagos que vayas realizando en tu celular y los que vayan saliendo en el transcurso del viaje, también te ayudará a comparar los precios en temporada alta y baja, sin mencionar que en el futuro sabrás en qué costos puedes ahorrar.