Los pensamientos positivos deben cultivarse desde la nińez, ya que a medida que crecemos la realidad se vuelve más cruda y a veces díficil de comprender, tenemos que tener un balance emocional que nos ayude a comprender las diferentes situaciones que vivimos y sacar lo positivo de las mismas.
La conducta del ser humano es algo compleja pero predecible a la vez, según algunos estudios la salud en general abarca: la salud física, la mental o psicológica y la red social de la que disponemos. Las tres van de la mano, se relacionan entre sí y su nivel saludable nos proporciona bienestar personal y por tanto calidad de vida.
La falta de esta salud mental, afecta la forma en que pensamos, sentimos y actuamos cuando enfrentamos la vida. Esta también se refleja en la forma de cómo manejamos el estrés, nos relacionamos con los demás y tomamos decisiones.
Es importante que cuidemos tanto nuestra salud física como mental. Hacer ejercicio, disfrutar tiempo en familia, ver una película con amigos, leer un libro, cargarnos de pensamientos positivos y vivir una vida bajo buenos principios y valores, nos ayudará no solo a tener una salud mental estable, sino una vida plena.
Por eso te compartimos cinco consejos que te ayudarán a mantener un equilibrio emocional y físico.
1.- Realiza actividad física
La práctica regular y adecuada, incluido cualquier movimiento corporal que requiera energía, puede reducir el riesgo de muchas enfermedades y trastornos no transmisibles. El ejercicio tiene múltiples beneficios para nuestro estado de salud en general y si lo hacemos a diario ayudará a reducir el nivel de la actividad fisiológica que se asocia al estrés, la ansiedad o la ira.
2.- Aliméntate bien
Hoy más que nunca debemos reflexionar en el tipo de alimentos que estamos consumiendo. Los expertos recomiendan ingerir cantidades balanceadas de frutas, verduras, legumbres, carnes blancas y rojas pero magra. Mantener una dieta saludable te da un cuerpo sano y te hará sentir bien.
3.- Un buen descanso
Otro punto muy importante es: dormir de siete a ocho horas diarias, la falta de sueño debilita directamente el sistema inmunológico. Descansar bien ayuda a reducir la probabilidad de que aparezcan algunos problemas físicos y psicológicos.
4.- Toma tiempo para relajarte
Luego de una semana de trabajo o un año de muchos retos, siempre es bueno tomar tiempo para relajarse, ya sea escuchando música, jugar con amigos, salir de vacaciones o dar un paseo a la playa, todo esto traerá tranquilidad a tu mente y reducirá el nivel de estrés, al ser una actividad fuera de lo normal, te resultará relajante.
5.- Cultiva pensamientos positivos
La salud mental tiene que ver también con la perspectiva con la que se ve la vida. Debemos gestionar adecuadamente las preocupaciones y los pensamientos negativos. Y aunque a veces la realidad es dura, siempre hay una solución.
“Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos.”
- Mahatma Gandhi.
Recuerda, aunque el miedo, la preocupación y el estrés son respuestas normales en momentos en los que nos enfrentamos a la incertidumbre, a lo desconocido o a situaciones de cambios, debes procurar vivir con templanza y determinación para superar cualquier adversidad.